martes, 30 de diciembre de 2008

Ajedrez...

Hace exactamente 3 años que me fui de la casa de mis padres en Barquisimeto y me mude a vivir sola en Caracas. Creo que esa es la decisión más acertada que he tomado en mi vida. Cada vez que vengo me doy cuenta que mientras mi papa y mi mama son la reina y el rey en este ridículo juego de ajedrez y mis hermanas son las torres y mi hermano el caballo, yo soy un peón. Soy esa pieza que lo único que puede hacer es tratar de que no se lo coman las torres y los caballos del otro color... ni del mío propio.

Según ellos, yo lo único que hago en Caracas es perder el tiempo, madrugar y esclavizarme por otro, mientras que aquí podría estar dándome buena vida teniendo mi propio negocio y manejando el legado de la familia. Pero yo no quiero. Yo paso roncha, soy una esclava en mi trabajo, me estoy durmiendo todos los días por levantarme a las 4:30 de la mañana, pero ese es el precio de algo que el dinero no me puede comprar. La Libertad.

Yo soy feliz en Caracas lavándome mi propia ropa, planchándome, lavando el baño, cocinando lo que me gusta, viviendo sola. A mi me gusta la soledad, me encanta estar a solas con mis pensamientos.

Tengo 3 días en Barquisimeto, vine a pasar el fin de año, y ya he peleado 3 veces con mi mama y mi papa. Yo se que ellos me adoran, y yo a ellos. Pero como dice la canción “Lejos estamos mejor”.

Aquí yo no tengo no solo libertad de salir con quien quiera y a la hora que quiera, sino lo más importante, no tengo la libertad de elección. Yo elijo ver televisión hasta las 2 de la mañana. Yo elijo usar estos zapatos para salir. Yo elijo no almorzar hoy porque sencillamente no tengo hambre. Aquí eso no existe. Aquí hago lo que se hace en esta casa. A las 12 del mediodía se almuerza, tengas o no hambre. A las 11 todos a dormir, tengan o no tengan sueño.

Caracas no me hizo lo que soy hoy. Ya yo era así. Desordenada, impuntual y lesbiana. Solo que en Barquisimeto estaba tan reprimida que no podía manifestarlo. Por eso me desesperé, por eso las continuas peleas con mi familia, por eso decidí alejarme y mudarme sola a Caracas. Para ser yo realmente. No el robot sumiso que me criaron para ser. Yo no quiero ser un peón, ni siquiera una torre… Yo quiero ser la reina, y tener mi otra reina conmigo, y mi tablero esta en Caracas, no en Barquisimeto.



Volví por unos días
Y sentí como el tiempo se devolvió
Siguen al acecho las fallas del pasado
Y los motivos por los cuales me marché…

Si supieran el dolor que me da
Saberme ajena a ustedes
Sentirme extraña en esta casa inmensa
Que hace no mucho llamaba hogar…

Mi cuarto ya es la habitación de visitas
Así que ya no tiene mi toque personal
Mis afiches y adornos a la basura
¿Para que guardarlos? Ya no los necesitamos más…

Salvo algunos cajones con recuerdos
Es como si yo nunca hubiese vivido allí
No se como dicen extrañarme
Si cuando me ven no hacen mas que criticarme
Destruir mi coraza con palabras afiladas
Hasta dejarme llorando en esta cama
Que por mas que quiera ni siquiera siento mía…

Ellos no lo saben, creen que eso lo hacen por mí bien
Creen que mi desacuerdo con su pensar es malcriadez
Pero me pregunto si por alguna vez
Ellos se habrán preguntado ¿Será ella feliz así?

No me importa si preguntan o no
No me importa si les importa a ellos o no
Soy infeliz estando aquí
Escuchando sus insultos sutiles
Y sus comparaciones enfermizas,
Desearía poder hablar con ustedes y que me escuchen
Que entiendan mis explicaciones y se preocupen
Yo no quiero llorar porque no puedo estar a su lado
Porque parecemos estupidos perros y gatos
Yo no quiero que a ustedes les pase algo
Y pasar el resto de mi vida arrepentida
De no haber estado más tiempo aquí
Pero es tan putamente difícil
Compartir con gente que no te acepta
Que no te respeta por las decisiones que haz tomado
Quien cuando traías un 19 en un examen
Te preguntaba porque no habías sacado 20…
¡Felicítame por el 19 coño!

Deja de sobre exigirme que no soy un maldito robot
Deja de ordenarme que no soy tu sirviente
Déjame elegir porque tu no eres dictadora de mi mente
Nada es perfecto para ti, pues yo no quiero ser perfecta…
Amo las imperfecciones de mi vida
Amo mi desorden y mis incoherencias
Amo mi barriga y mi conciencia
Amo mi impuntualidad y mi inteligencia
Amo mi sinceridad y mi poca elocuencia
Amo mi fragilidad y mis palabras necias
Amo mi vida y lo que he hecho con ella…
Amo a mis padres y hermanos
Aunque no soporte vivir ni un segundo con ellos…