viernes, 25 de febrero de 2011

Carta a Cupido



Estimado Cupido

Saludos,

Nunca había tenido la necesidad de escribirte porque si soy sincera siempre me has tratado muy bien. Tus flechazos definitivamente duelen menos que las inyecciones de Pronapen que me he tenido que poner durante este reposo, de paso que siempre me has flechado con gente que definitivamente valen la pena como parejas, como amigas y en fin, como seres humanos. No tengo quejas en ese aspecto hasta los momentos.

Sin embargo, creo que hubo un pequeño malentendido en este último flechazo que me lanzaste. Te explico brevemente. Cuando L y yo terminamos y después de haber escrito algunos versos, escuchado algunas rancheras y haber destruido parte de mi hígado en su honor, yo te dije que ya había sanado y te pedí que por favor trajeras a mi vida a alguien tan especial como ella pero quizás con un poco más de paciencia. Sabemos que yo no soy fácil, pero también sabemos que tengo mucho que ofrecer. Yo pensé realmente que había sido bien específica en mi planilla de solicitud de novia nueva pero al parecer o no lo fui, o tu sencillamente me estás jugando una broma que realmente no me está pareciendo muy graciosa.

Me trajiste a una mina maravillosa, bella, con unos ojos espectaculares, interesantísima, inteligente, le encanta leer, le encantan los gatos, ama a Salvador, nunca nadie había jugado tanto con el! Ni yo misma! Le gusta cocinar, como estudia psicología mis problemas laborales y familiares le parecen interesantes, no se me imagino que puedo llegar a ser hasta un objeto de estudio, jeje. En fin, es el paquete completo porque aparte de todo lo anterior tiene su apartamento que comparte con sus dos gatitas y tiene su carrito para andar por ahí. Pero ¿Ves? Aquí es donde la cosa se complica.

En la planilla que me diste, en la parte de Requerimientos Adicionales (deseables pero no excluyentes) yo coloqué: “Que viva cerca o que tenga carro”. Desde que yo tengo uso de razón te he pedido eso y pensé que ya estaba sobreentendido que eso significa que si no tiene carro pues que viva cerca para no tener problema en llevarla a su casa, o, en dado caso que viva lejos, tenga sus propios medios para llegar a su casa y no tenga que depender siempre de mi. Yo se que casi nunca me haz concedido eso, siempre me mandas a la cima de la montaña o donde termina el horizonte, pero siempre he pensado que es tu manera de ponerme a prueba pero esto que hiciste ahorita Cupido de verdad me parece una burla.

En este caso me la mandaste con carro pero no vive cerca… Esta bien… Pero como dice mi amorcito porteño: Che, te hago una pregunta, ¿Me explicás como sheego a Buenos Aires en carro? ¿O cómo shega ella a Caracas en un Fit? No pensé que la planilla incluía candidatas internacionales de verdad porque si no hubiese escrito algo así como: “Que viva dentro de las fronteras venezolanas o que tenga avión”. ¿No crees tú?

Bien macabro el chistecito que estas haciendo con ella y conmigo ¿No?... ¿Y ahora qué? ¿Nos regalaste toda esta historia de amor así tipo película pero le vas a poner un final de cine europeo? Porque a mi me encanta el cine europeo… siempre y cuando yo no sea la protagonista… Si yo actúo dame un final de Hollywood… tu sabes… feliz…

Mi porteña bella me tiene desbordando palabras por los poros… quiero agarrar todas las paredes y escribir y escribir y escribir… me inspira tantas cosas… me inspira querer agradecerte Cupido por haberla puesto en mi vida, pero también me hace querer matarte con tus propias flechas por haberla puesto TAN LEJOS en mi vida…

¿Entonces Cupid? ¿Cómo vamos a hacer?

En espera de una pronta y positiva respuesta,

Cordialmente,

Yo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Be nice