Retomando el gaynalisis....

Ya es hora de retomar, así sea brevemente porque tengo mucho sueño, el tema de los roles en este confuso mundo gay.

Ya hemos hablado de los Carritos, los Peluches y los Fisher Price**, pero hoy les introduciré (jaja, ya parezco carrito) dos nuevos términos que han venido saliendo espontáneamente en nuestras conversaciones y los cuales utilizamos para identificarnos a nosotros y a los demás de manera más precisa.

El primero de ellos es el “Bob”. El nombre deriva de la comiquita “Bob El Constructor” y como se deben estar imaginando, se aplica a las mujeres que la palabra carrito les queda pequeña. Generalmente son de contextura fuerte, espaldas anchas, pocas curvas y no se visten en lo absoluto femeninas. Cualquier gay las identifica y un gran porcentaje de heteros voltearía a mirarla pero no precisamente para buceársela, aunque se dan casos.

Su manera de actuar y de hablar con las mujeres grita abiertamente HOMBREE, sin embargo, su entrepierna indica claramente, MUJEEER. Este tipo de carritos visitan mucho los antros mas conocidos de Sabana Gay, Exodus, 2 barras, Punto G entre otros.

De los Bobs, nace otro grupito muy reducido que anda a hurtadillas en el mundo gay caraqueño: “Las Bob Lady”. Estas son chicas con facciones delicadas, manera de vestir sofisticada, usualmente blanquitas y con cabello corto pero fashionable. Educaditas, atentas y “caballeras”, ellas emanan una vibra medio ambigua, tipo Kate Moennig y Kim (no recuerdo el apellido, la niña más linda de American Next Top Model). Estos son exactamente el tipo de carritos que me llaman la atención a mi, sin embargo o están ocupadas ya o son unas pe… rsonas muy amplias de corazón.

El otro termino que nació en las mesas del Recreo es “Carrito Barbie” inspirado primordialmente por nuestra querida amiga Galli, quien dice ser carrito pero sus camisitas rosadas y sus gestos pasados a veces de coquetos la hacen parecer un peluche total. Para ella eso a veces es un problema porque siempre esta siendo acechada por los otros carritos, de hecho tiene una stalker personal a la que llamamos tiernamente Señorita Frappe. El barbie-movil es un carrito delicado, femenino, adaptable, moderno, pero a pesar de todo es como tal, un carrito… y sino creen que Galli sea carrito, pues simple, como dice ella… ¡Pruebenme!

De aquí hay mas tela que cortar, la cosa esta en que tengo mucho sueño! Mi horario es muy sacrificado, pero igual tratare en lo posible de seguir con mi micro-gaynalisis.


**Ver primera entrada del blog si no tiene idea de lo que estoy hablando.